UNIDAD DE PSICODERMATOLOGÍA
Los trastornos psicodermatológicos son cada vez más frecuentes en la práctica clínica dermatológica. Las estadísticas sobre la incidencia de los trastornos psiquiátricos entre los pacientes dermatológicos son muy variables pero se considera que aproximadamente la tercera parte de los pacientes que consultan por un problema cutáneo tienen una cierta base psicodermatológica. Por esta razón, en el Servicio de Dermatología se ha establecido la Unidad de Psicodermatología, en colaboración con el Servicio de Psiquiatría. Esta unidad engloba los siguientes grupos de enfermedades:
- Síndromes psiquiátricos con expresión dermatológica (patomimias, alopecia neuromecánica, dismorfofobias y disestesia pseudoparasitaria)
- Afecciones cutáneas con una elevada incidencia de factores psicoemocionales (escoriaciones, liquen simple, vulvodinias, glosodínias, urticaria crónica y prurito psicógeno)
- Afecciones dermatológicas modificadas por el estrés y con posible rebrote psicosomático (psoriasis, dermatitis atópica, dermatitis seborreica, rosácea, alopecia areata, acné…)
La ausencia de unas guías de actuación claras y protocolos definidos ha motivado el diseño de unas líneas de investigación propias para conocer mejor las necesidades de los pacientes psicodermatológicos. Debemos destacar:
- Psoriasis, Estrés y Calidad de Vida
- Dínias (Glosodínia/Orodínia. Vulvodinia. Tricodinia)
- Prurigo Nodular
- Trastornos del impulso. Trastorno obsesivo/compulsivo
- Disestesia pseudoparasitaria
- Dermatitis atópica – trastorno por déficit de atención
A aquellos pacientes derivados a la Unidad de Psicodermatología se les realiza una historia clínica completa junto con las exploraciones necesarias para descartar cualquier enfermedad orgánica. Se valoran asimismo mediante test psicológicos de ansiedad, depresión y de calidad de vida. Una vez establecido el diagnóstico, se instaura el tratamiento médico adecuado. En aquellos casos en que sea necesario, se remite al paciente al psiquiatra y/o psicólogo.