¿Qué es?
El metotrexato es un fármaco antimetabolito del ácido fólico, indispensable para el crecimiento celular, que también tiene un efecto antiinflamatorio y antitumoral.
¿Cuándo se utiliza?
El metotrexato se utiliza en el tratamiento de la psoriasis moderada-grave, y es eficaz no sólo para la afectación cutánea sino también para la articular. Asimismo, se ha utilizado en otras enfermedades cutáneas inflamatorias y neoplásicas (PLEVA, enfermedades ampollosas, dermatomiositis, lupus eritematoso sistémico y cutáneo subagudo, micosis fungoide, papulosis linfomatoide, etc.)
¿Cómo se administra?
El metotrexato se puede administrar por vía oral o bien subcutánea, y la dosis que se utiliza es entre 5 y 20mg. semanales. En caso de pautarse en comprimidos, dado que cada uno de ellos es de 2,5mg, se utilizarán entre 2 y 8 comprimidos a la semana, que se dividen en 1, 2 o 3 tomas repartidas cada 12h (especialmente si hay molestias gastrointestinales). En caso de administración subcutánea, se administra toda la dosis en una sola inyección semanal. El uso de metotrexato se acompaña de la administración de ácido fólico, para contrarrestar algunos de sus efectos secundarios. Existen diferentes pautas de administración.
Efectos secundarios
Los efectos secundarios más frecuentes son los gastrointestinales (náuseas, vómitos, dolor de estómago, pérdida del apetito, úlceras bucales), que pueden evitarse variando la posología. El metotrexato tiene potencial riesgo hepatotóxico, sobre todo a largo plazo, y especialmente si hay antecedentes de ingesta excesiva de alcohol, diabetes, obesidad o antecedentes personales o familiares de enfermedades hepáticas. Excepcionalmente, puede provocar mielosupresión y fibrosis pulmonar. Por estos posibles efectos secundarios, el uso del metotrexato implica la realización periódica de análisis de sangre.
Dado que el metotrexato es un fármaco teratogénico, está contraindicado durante el embarazo y se aconseja el uso concomitante de un anticonceptivo. También está contraindicado durante la lactancia. En el hombre, el metotrexato puede alterar la calidad del esperma y producir alteraciones genéticas. Por lo tanto, tanto por la mujer como por el hombre, se aconseja discontinuar la medicación cuatro meses antes de la gestación.
Precauciones
La dosis del metotrexato se debe ajustar según la función renal. Existen numerosas interacciones farmacológicas con el metotrexato, siendo las más destacadas los antagonistas del folato (trimetoprim, sulfonamidas, fenitoína), fármacos que reducen su eliminación (antiinflamatorios, ciclosporina) y el acitretino. Por esta razón deberá consultar a su dermatólogo la introducción de un nuevo medicamento.